lunes, 21 de marzo de 2016

Curiosidades en el Día Mundial del Agua

El agua es un elemento esencial para la vida puesto que un 60% del peso corporal es agua. ¿Damos realmente al agua la importancia que tiene? En el Día Mundial del Agua, vamos a pensar un poco sobre ello.


Algunas de las características principales del agua son:

- En el cuerpo humano es el medio para permitir muchas reacciones metabólicas.
- Es el principal componente de la sangre.
- Es transportador de nutrientes, hormonas y otros compuestos hacia el interior de las células.
- Es el vehículo de sustancias de desecho hacia el exterior de la célula.
- Regula la temperatura corporal.


Es vital mantener un equilibrio hídrico entre las ganancias y las pérdidas de agua a lo largo del día: la manera de aportar agua es a través de bebidas y alimentos, y la pérdida de agua se produce a través de la orina, heces, sudor, transpiración y respiración.


¿Tengo que esperar a tener sed para beber? La respuesta es NO. La sed es una señal tardía de deshidratación, cuando ya hemos comenzado a perder al menos un 1% de nuestro peso corporal o la concentración osmótica es alta.


Las recomendaciones hídricas varían según la población a la que se refieran. La EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) publicó en 2010 unas recomendaciones que son las siguientes:

  • Bebés: de 0-6 meses: 680 mL/día (a través de la leche)
  • Bebés de 6-12 meses: 800-1000 mL/día
  • Niños de 1-2 años: 1100-1200 mL/día
  • 2-3 años: 1300 mL/día
  • 4-8 años: 1600 mL/día
  • Niños 9-13 años: 2100 mL/día
  • Niñas 9-13 años: 1900 mL/día
  • A partir de 14 años igual que adultos.
  • Hombres: 2500 mL/día
  • Mujeres: 2000 mL/día


Estas necesidades varían en caso de embarazo, que serían un poco superiores a las del adulto, y en lactancia, que son a su vez superiores al embarazo.


En el caso de personas ancianas hay que tener en cuenta que el umbral de la sed aumenta, esto significa que cuando una persona mayor siente sed está ya muy deshidratada. De ahí la importancia de beber agua o líquidos con frecuencia, especialmente si la temperatura ambiental es elevada.


En caso de enfermedad (fiebre, vómitos, diarrea, quemaduras) las necesidades hídricas aumentan considerablemente, haciéndose incluso necesario la administración de suero. Es importante en estos casos beber muy pocas cantidades pero muy frecuentes.  


Algunas recomendaciones generales:

1. No esperar a tener sed para beber agua.
2. Beber al menos 6 vasos de agua al día, sobre todo entre una comida y otra. Hay agua que también se aporta a través de otros líquidos o alimentos.
3. Beber líquidos antes, durante y después de realizar cualquier actividad física.
4. Es aconsejable beber agua antes de salir de casa y llevar una botella de agua, así podremos hidratarnos en cualquier momento.
5. Con niños o ancianos es bueno ofrecerles agua a menudo, ya que son los principales grupos de riesgo expuestos a la deshidratación.
6. Para mujeres embarazadas o lactantes se recomienda beber 3 litros de líquidos al día (entre agua, otras bebidas, alimentos...).

Mitos relacionados con el agua...

- El agua engorda: el agua aporta 0 kcal, ni engorda ni adelgaza. Es cierto que el agua sacia, por lo que si la tomamos antes de las comidas tendremos menos hambre y comeremos menos cantidad.

- Es necesario beber entre 2 y 3 litros de agua al día: lo cierto es que necesitamos aportar entre 2 y 3 litros de agua, pero no significa que tengamos que beber esos litros de agua, ya que el agua también la aportamos con otros líquidos (bebidas, cafés, infusiones, caldos, sopas) y con los alimentos.

-  El agua es inocua: en principio consideramos que el agua no es tóxica. Sin embargo, beber demasiada agua podría causar un desequilibrio electrolítico conocido como hiperhidratación o intoxicación por agua.

- Es importante beber mucha agua después de hacer deporte: tras realizar ejercicio físico, y más cuando ha sido intenso y la temperatura es elevada, es necesario recuperar ese agua perdida, pero es mejor hacerlo con bebidas que contengan sales puesto que no sólo perdemos agua con el sudor.

- La digestión es más rápida si se bebe mucha agua durante las comidas: el agua hace que el grado de acidez del estómago sea menor, lo que provoca que disminuya la velocidad de las enzimas digestivas, así que la digestión será más lenta.

- El alcohol es una buena bebida cuando estoy sediento: aunque en un primer momento nos pueda parecer que nos quita la sed, el alcohol al poco tiempo nos produce una deshidratación mayor. 



Como conclusión, es importante mantener nuestro cuerpo bien hidratado, pero hay muchas maneras de hacerlo, tanto con bebidas como a través de los alimentos; no hay que esperar a tener sed para beber; y es mejor tomar agua entre horas y no dentro de las comidas para hacer una mejor digestión. ¡Feliz Día Mundial del Agua!


miércoles, 9 de marzo de 2016

¡Buen Camino! y ¡buena comida!

¡Buen Camino! es, sin duda, la frase más escuchada a lo largo de todo el trayecto hasta llegar a Santiago. Además, se oye la misma frase en el mismo idioma, aunque con todos los acentos posibles. Pero, ¿qué es necesario para conseguirlo?

Diría que es fundamental un buen calzado, nunca para estrenar sino habiéndolo domado antes; ropa cómoda, adecuada al tiempo meteorológico; el descanso durante cada etapa y por supuesto al finalizarla; una planificación previa de cada etapa... Y la alimentación antes, durante y después.

Alimentación antes de empezar el Camino...
Durante los 3 días previos a empezar la peregrinación se recomienda llenar los depósitos de glucógeno (son los que nos permiten obtener energía) con hidratos de carbono: pasta, arroz, patata, pan, legumbres; así como también aumentar la ingesta de vitaminas: fruta y verdura.

Esto tiene su explicación en que nuestro cuerpo va a ser sometido durante varios días a un desgaste por encima de lo normal. Es distinto si hacemos los últimos 100 km necesarios para conseguir la Compostelana (suelen ser 3 o 4 etapas) o si ya nos vamos a 10 etapas o incluso el Camino entero. Para las peregrinaciones de mayor duración es imprescindible cuidar la alimentación desde los días anteriores hasta varios días después de concluirla.

Alimentación después del Camino...
Debido al gasto energético que ha sufrido nuestro cuerpo durante estos días se hace fundamental cuidar la nutrición y el reposo durante los días siguientes a la conclusión. Para ello es vital llenar de nuevo los depósitos de glucógeno, que a pesar de haber cuidado la alimentación durante la travesía es muy probable que hayan disminuido de nuevo; para ello procedemos igual que antes de empezar, con dieta alta en hidratos: arroz, pasta, patatas... Además de aumentar también las proteínas (carne, pescado, huevo) para mantener el músculo que hayamos hecho. Las legumbres son un alimento perfecto para este momento, debido a su contenido tanto en proteínas como en hidratos.

Es muy importante también hidratarnos a la vuelta con líquidos y sales puesto que las células de nuestro cuerpo se pueden resentir después de muchos días sudando y transpirando mucho, más si se ha hecho durante los meses de más calor.


¿Y qué hacer durante el Camino?
            - Realizar siempre un desayuno completo antes de comenzar la etapa: café o colacao; pan o cereales; algo de bollería; fruta o zumo. Con un desayuno completo nos aseguramos que empezamos el día con suficiente energía y vitaminas para patear los kilómetros que nos separan de la meta de ese día.  


            - Comer algo cada 2 horas: es importante elegir bien los alimentos que vamos a ir tomando durante la etapa. Siempre se recomienda ingerir alimentos que aporten energía como los frutos secos, chocolate o barritas energéticas. El plátano nos aportará tanto energía como potasio, necesario para el buen funcionamiento muscular.

            - Es fundamental la hidratación durante cada etapa. Se recomienda llevar una cantimplora con agua, que iremos rellenando en las fuentes que vayamos encontrando. Cuando paramos a descansar algunos minutos se pueden tomar bebidas isotónicas, que gracias a la proporción de sales nos ayudan a recuperar el equilibrio hidroelectrolítico. No es necesario cargar con muchas botellas, puesto que hay fuentes de agua potable a lo largo de cada etapa.

            - La comida fuerte del día la reservamos una vez terminada la etapa, después de haber conseguido sitio en el albergue para asegurarnos que dormimos bajo techo. En casi todos los pueblos por los que pasa el Camino existe el menú del peregrino y es recomendable tanto nutricionalmente como por su precio asequible.
 
            - La cena es recomendable hacerla ligera y pronto para poder acostarnos temprano para reponer fuerzas y porque en muchos albergues apagan las luces a una hora determinada. Si se realiza en verano es muy importante aprovechar las horas de menos temperatura para hacer la etapa, por eso se suele empezar muy temprano, incluso antes de las 7 de la mañana. Es de vital importancia el descanso nocturno para asegurarnos el rendimiento durante las siguientes etapas.

No se recomienda el consumo de alcohol ya que es una fuente de calorías vacías y de deshidratación.


Espero que os sirvan estas recomendaciones a todos aquellos que vais a realizar el Camino de Santiago, a mis amigas que lo van a hacer durante la semana de Pascua (¡qué pena no poder ir con vosotras!) e incluso a los peregrinos de la Javierada de este sábado. A todos, ¡buen Camino!

miércoles, 3 de febrero de 2016

#DiaMundialCancer

Aprovechando que hoy es el Día Mundial contra el Cáncer quiero aprovechar para sumergirme un poco en este tema tan amplio y que ahondaremos también en otros post más adelante.


Hoy me quiero centrar en la caquexia cancerosa que produce en un gran número de casos una desnutrición de la persona que la padece. Se caracteriza por anorexia, disminución de peso (tanto por masa muscular como masa adiposa), debilidad e inmunosupresión, que si se mantiene el tiempo puede conducir a la muerte. Sus consecuencias son disminución de la síntesis proteica (pérdida de músculo), disminución de la tolerancia al tratamiento antineoplásico y una menor supervivencia.

Es muy importante tratar la caquexia puesto que supone una mejora en la vida del paciente, mayor respuesta al tratamiento y menor toxicidad del mismo, frena el deterioro del sistema inmune y previene el fallecimiento prematuro.

Antiguamente se pensaba que nutriendo al paciente se nutría también al tumor, pero se ha visto que no es cierto. Si bien el tumor utiliza nutrientes para desarrollarse, eso no quita que el paciente deba estar bien nutrido para que su supervivencia sea mayor. 

La intervención nutricional será distinta si se trata de un paciente en fase curativa o paliativa, estado nutricional en el que se encuentra y tratamiento antitumoral que esté siguiendo.

A grandes rasgos...

- Las proteínas que debe ingerir un paciente oncológico sin estrés serán entre 1-1.2g/kg/día, un poco más elevado que una persona sana. En el caso de que las demandas sean elevadas o tenga estrés metabólico (por cirugía o tratamiento antitumoral) esas necesidades aumentan a 1.5-2g/kg/día. Las proteínas las encontramos en la carne, el pescado, huevos y legumbres.

- Los lípidos o grasas (aceite, mantequilla, dulces, grasas de carnes) se mantienen como los de una persona sana. Se recomienda aumentar los ácidos grasos monoinsaturados y los acidos grasos ω3 (pescados azules, frutos secos, aceite de oliva).

- Los hidratos de carbono se mantienen (pan, pasta, arroz, patata, legumbres).

- En general si la ingesta es buena no es necesaria una suplementación de vitaminas ni micronutrientes.

- El agua que se debe ingerir dependerá de las pérdidas o la patología, siendo recomendable ingerir unos 40mL/kg/día.

- Los minerales dependerán del balance electrolítico y los valores bioquímicos. Si hay ascitis o edemas se deberá restingir el sodio (agua con gas, conservas, salazones, embutidos, precocinados, cereales de desayuno); aumentar potasio en caso de diarreas (legumbres, cítricos, verdura, frutos secos, integrales, leche, carne, plátano); aumentar cloro si hay vómitos (cereales, verduras, frutas, frutos secos, sal, carne, vísceras, leche, huevo).


Recomendaciones en caso de caquexia...

1. Realizar comidas pequeñas pero frecuentes.
2. Comer alimentos que sean altos en calorías y proteínas: huevo, frutos secos, pasta, leche.
3. Evitar líquidos con las comidas para disminuir el problema de saciedad temprana.
4. Aprovechar los momentos del día en los que se encuentra mejor para hacer las comidas.
5. Estimular el apetito realizando ejercicio ligero.
6. Agregar calorías y proteínas extras a los alimentos y purés (mantequilla, frutos secos, miel, azúcar)
7. Crear un ambiente agradable y variado; la presentación de la comida deberá ser atractiva (como nuevas recetas, comer con amigos, preparar la comida con variación de color y textura).
8. Evitar aromas fuertes, que el paciente no huela durante la preparación, servir platos fríos que tienen menos aromas.
9. Utilizar cubertería de plástico si nota sabor metálico. 

He querido dar una idea global de la caquexia cancerosa y de lo importante que es mantener a la persona bien alimentada y nutrida para poder afrontar esta enfermedad. Quedan pendientes más posts profundizando en otros detalles del cáncer y su relación con la alimentación. ¡Esto no ha hecho nada más que empezar!



domingo, 17 de enero de 2016

Alimentación durante la lactancia

La alimentación sabemos que es importante en todas las etapas de la vida, pero hay algunas que son aún más importantes si cabe, y una de ellas es la lactancia, debido a que nos jugamos mucho: tanto por la calidad de la leche materna (con lo que eso conlleva para el bebé) como para la salud de la madre.

La alimentación durante la lactancia debe ser suficiente para cubrir las necesidades nutricionales de la madre, las necesidades específicas de la producción de leche y alimentar bien al bebé.

Este es un tema que llega con un par de años de retraso, cuando una amiga me pidió que le hiciera una dieta después de tener a su primera niña. No obstante, mejor tarde que nunca, y este post va dedicado a ella, a sus dos niñas ¡y a los que vendrán! Y a todas aquellas madres que están en este periodo de su vida.

¿Qué ventajas tiene la lactancia materna?
- Es nutricionalmente completa, por eso las fórmulas infantiles intentan asemejarse lo más posible.
- Reduce el riesgo de alergias y protege frente a infecciones.
- Favorece el desarrollo afectivo y emocional entre madre e hijo.
- No precisa ningún tipo de preparación ni de gasto económico.
- La recuperación de peso en la madre es más rápido y hay una menor incidencia de depresión posparto.


Vistas las ventajas sobre la lactancia artificial, siempre que se pueda es mejor recurrir a la lactancia materna, al menos durante los 6 primeros meses.

La calidad y variedad de los alimentos que consume la madre están directamente relacionados con el volumen y composición de la leche, por lo tanto también sobre la salud de la madre y del bebé. Es por esto que la alimentación de la madre debe evolucionar según los requerimientos nutricionales del lactante. La dieta durante la lactancia es prácticamente igual a la seguida durante el embarazo.

La alimentación durante la lactancia debe ser rica en energía, proteínas y vitaminas.

- ENERGIA: Se sabe que son necesarias 85 Kcal para producir 100 mL de leche (70 kcal de leche y 15 kcal el producirla). Se estima que con un aporte de energía de 640 Kcal se consigue mantener la lactancia de forma exclusiva durante los primeros seis meses de vida (hay estudios que tienen en cuenta la grasa acumulada durante el embarazo y que también es utilizada para la producción de leche, por lo que el incremento de energía sería de unas 500 kcal al día). 

- PROTEÍNAS: Las recomendaciones RDA indican que un aporte suplementario de 15 g/día durante los primeros seis meses es suficiente.

- GRASAS E HIDRATOS: no son necesarios aportes suplementarios sobre los de una dieta normal y equilibrada para un adulto sano.

- VITAMINAS: se debería aumentar el consumo de vitamina A (950μg al día) y mantener los niveles de vitamina D que se consumían durante el embarazo (10 día).

- MINERALES: se recomienda consumir 1.200mg de Calcio al día y 990mg de Fósforo. Se deberían consumir 200μg de Yodo, provenientes de la sal yodada, pescados y lácteos. 

Además hay que aumentar el consumo de fibra (29g al día) y que los ácidos grasos saturados, trans y colesterol sean lo más bajo posible.

La suplementación con productos comerciales siempre debe ser bajo supervisión médica.  

A modo de resumen
1. Se recomienda realizar seis comidas bien repartidas a lo largo del día.
2. La leche o derivados deben estar presentes en cada una de ellas.
3. Los azúcares (complejos, evitar los refinados) debe tomarse en, al menos, cuatro de las seis comidas establecidas. Pan, pasta, arroz, patata...
4. Las grasas mejor si son de origen vegetal. Deben aportarse en la misma proporción (saturadas, monoinsturadas, poliinsaturadas) que en la dieta de un adulto sano.
5. Las frutas y verduras deben estar presentes para asegurar un aporte adecuado de vitaminas, minerales y fibra.
6. Se recomienda evitar dietas restrictivas y mucho más si son para perder peso. La cantidad de proteínas que contiene la leche puede verse afectada si la madre está desnutrida.
8. Se debe asegurar un aporte de líquidos de unos 2,5-3 litros diarios.
9. Se debe cuidar la higiene para evitar complicaciones de tipo infeccioso que dificulten o impidan la lactancia.

Espero que os sirva de ayuda...


jueves, 17 de diciembre de 2015

Una Navidad ligera

Las fiestas de Navidad son conocidas, entre otras muchas cosas, por los kilos. Y no me refiero a la campaña del kilo, que este año ha triunfado también desde las farmacias. Es el primer año que se realiza con alimentación infantil (leches, cereales, potitos), y se puede decir que la Gran Recogida 2015 del Banco de Alimentos ha sido todo un éxito.

Me refiero más bien al temor que se tiene a engordar unos kilos, o más que temor ya se cuenta con ello y se da por supuesto. Estas Navidades te propongo, además, "engordar" no de kilos, sino engordar de alegría, de generosidad, de cariño, de tiempo dedicado a los demás, de compasión ante los que sufren o están solos... ¿Quieres intentarlo?

No está mal eso de ponerse a dieta con el año nuevo, pero podemos empezar a cuidarnos desde ya. Por eso me adelanto a las fiestas y te adjunto un menú y una serie de recomendaciones que pueden ayudar a mantenernos a raya y que no se nos haga tan dura la cuesta de enero.



Ejemplo de menú para la comida:

            Entrantes:         Jamón ibérico con pan y tomate
                                   Brocheta de anchoas y guindillas
                                   Calabacines rellenos con espárragos verdes

            Plato principal (elegir): Merluza al vapor con vinagreta
                                         Ó Trenzas de solomillo de cerdo con champis

            Postre:             Fresas con mascarpone


Este es un ejemplo de comida que podríamos elegir, por ejemplo, para el día de Navidad o Año Nuevo. Contiene tanto proteínas de origen animal, como algo de hidratos de carbono, fruta y verdura... Se podría decir que es una comida bastante equilibrada. Para el caso de la cena, podríamos hacer una sopa de fideos o una crema de verduras añadiéndole un poco de patata y algo de pan (para conseguir cubrir los hidratos de carbono).

No obstante, sé que muchas veces la comida nos va a venir dada, y no podremos seleccionar aquellos platos más sanos y equilibrados. Por eso, en la cena suelo recomendar hacerla más sencilla, a base de frutas y verduras, que normalmente es lo que escasea en las comidas copiosas de las celebraciones.

Algunos consejos que te pueden ayudar...

- Si tienes una comida, hacer la cena más ligera; y al revés.
- Comer despacio, masticar bien (dar conversación te puede ayudar a conseguirlo).
- Ir caminando al lugar de la comida o salir a la calle a estrenar los Reyes.
- Beber mucha agua: el alcohol nos deshidrata. Combinar cualquier bebida que tomemos con agua.
- Aprovechar el desayuno y la merienda para ingerir fruta (en la comida y la cena será más difícil conseguirlo).
- Si podemos elegir un plato, elegir el menos calórico, las tecnologías culinarias más sencillas, las que aporten menos grasa (horno, vapor, plancha).
- No llenarnos el plato, ponernos un poco menos de lo que nos gustaría.
- Controlar la ingesta de turrón y dulces.


Creo que te pueden ayudar estas recomendaciones ante las fechas que se aproximan. No lo olvides: intenta equilibrar la comida con la cena (si una es más copiosa, que la otra sea más sencilla) y muévete.
 
Espero que te sirvan y... ¡feliz Navidad!

martes, 24 de noviembre de 2015

#ceroDIABETES

Hoy celebramos con orgullo el Día Mundial del Dietista-Nutricionista. El lema de este año (#ceroDIABETES) está centrado en la Diabetes, por eso quiero hablar de esta patología.


La diabetes es una afección crónica en la que el organismo no tiene capacidad de producir insulina o de utilizarla correctamente. Existe la Diabetes Mellitus tipo 1, tipo 2 y la gestacional.

Diferencias principales:
La DM1 tiene lugar como consecuencia de una reacción autoinmune, en la que se afectan las células del páncreas y no pueden producir insulina. Suele afectar a niños y jóvenes. El tratamiento es a base de insulina y se hace necesario un control de la alimentación. Los síntomas que la caracterizan son polifagia (aumento del apetito), polidipsia (aumento de la sed) y poliuria (aumento de la orina).

En la DM2 el organismo puede producir insulina, pero no en cantidad suficiente o bien no responde adecuadamente, produciéndose un acumulo de glucosa. Afecta a adultos aunque cada vez es mayor el número de jóvenes y niños que la padecen. Algunos factores de riesgo son la obesidad, la mala alimentación, la falta de ejercicio, antecedentes familiares...

Objetivos
Glc prepandrial (mg/dL)
Glc postpandrial (mg/dL)
HbA1c (%)
DM1
70-120
<160
<6.5
DM2
70-110
<135
<6.5

Es importante mantener los niveles de glucosa dentro de los límites indicados en la tabla, puesto que las complicaciones de la hiperglucemia pueden llegar a ser muy graves (los órganos afectados son el corazón y los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios, pudiendo llegar a producir amputaciones y coma diabético).

La diabetes gestacional es diagnosticada en mujeres en etapa avanzada del embarazo. No es peligroso para el bebé puesto que ya está prácticamente formado, aunque es importante controlar los niveles de glucosa en sangre, recurriendo a la dieta o en algunos casos también a insulina o antidiabéticos orales.
        
Centrándonos en la alimentación...
La alimentación del diabético no debe diferir de la alimentación de la población sana:
-          Pocas calorías en caso de sobrepeso u obesidad.
-          Presentes todos los grupos de alimentos (incluidos los Hidratos de Carbono).
-          Aporte adecuado de fibra.
-          Ácidos grasos insaturados: aceite de oliva, pescado (azul), frutos secos.
-          Ausente o muy baja en AGtrans y AGSaturados: bollería industrial, dulces,  embutidos, grasas.
-          sal.
-          Fraccionar la alimentación a lo largo de día (3 tomas principales si no hay riesgo de hipoglucemia, o 3 principales + 2 colaciones).

Monitorización de Hidratos de Carbono:
Es importante conocer la cantidad de HdC que se van a ingerir para ajustar el tratamiento, controlar la glucemia y liberalizar la alimentación. Aportando una cantidad fija de HdC y constante a lo largo de los días, se evitan fluctuaciones en la glucemia.

1 ración de alimento equivale a la cantidad de alimento que contiene 10g de HdC:
  • 200mL leche = 2 yogures
  • 50g patatas = 20g legumbres = 20g pan = 15g tostadas = 15g arroz = 15g pasta
  • 150g melón, sandía, fresas, pomelo = 100g albaricoque, naranja, pera, mandarina, ciruelas, piña, kiwi, manzana = 50g plátano, uva, cerezas, higos, chirimoya, nísperos.
  • 1 plato de verdura
Las grasas y alimentos proteicos apenas contienen HdC.

El número de raciones de hidratos de carbono a consumir por cada persona deberá estar fijado por un profesional, teniendo en cuenta el índice de masa corporal de la persona, el tipo de diabetes y el tratamiento al que esté sujeto. Es importante controlar el número de raciones de hidratos que se consumen especialmente en personas que se administran insulina.


Recomendaciones nutricionales:
-          Técnicas culinarias: utilizarlas todas. Moderar fritos, rebozados y empanados porque absorben más grasa.
-          Moderar el empleo de sal. Usar aceite de oliva.
-          Usar sacarina como sustituto del azúcar. Se desaconseja la fructosa como edulcorante (se absorbe más lento que el azúcar).
-          Productos dietéticos: no hay evidencias suficientes para su recomendación.
-          Alcohol: aporta azúcares y es hipoglucemiante. Limitar su ingesta (en todo caso hacerlo junto a las comidas).
-          Prohibido fumar (es uno de los factores de riesgo más importante para las enfermedades cardiovasculares).
-          Horarios regulares de comidas, no saltarse ninguna.
-          Fruta: no abusar de su consumo (contiene fructosa). Tomarla mejor con piel.

Limitar:
Pastelería, bollería, chocolates, alimentos azucarados, energéticos, miel, zumos, golosinas... Si se incluyen esporádicamente, controlar cantidad y frecuencia, y tomarlos con alimentos proteicos, grasos o ricos en fibra (disminuyen índice glucémico global).

He intentado exponer la importancia de una buena alimentación si se padece diabetes, y como dietista-nutricionista es muy importante la labor de educación nutricional a todas las personas, puesto que el número de personas con diabetes aumenta mucho año tras año.

Nuestra misión no sólo se centra en cuidar la alimentación una vez se ha detectado la diabetes, sino también en cómo prevenirla a través de una alimentación sana y equilibrada. Es una bonita labor, ¿no crees? Estoy orgullosa de ser dietista-nutricionista.

Para más información os dejo algunos links de páginas interesantes...
http://www.idf.org/
http://nutrinenes.com/

miércoles, 4 de noviembre de 2015

Test lipidómico

Hace unos días tuve la suerte de asistir a una sesión cuyo título era: “Salud y prevención: Nuevo diagnóstico personalizado para una salud equilibrada”. Con semejante título y el aliciente de ser en inglés, no me pude resistir. Realmente no sabía muy bien a lo que iba, pero me llamó la atención eso del test lipidómico, sobre todo porque no lo había oído nombrar nunca.

¿Qué es el test lipidómico?
Se encarga de analizar molecularmente la membrana celular del glóbulo rojo maduro. Estudia las moléculas lipídicas como algo dinámico. Sabemos que los eritrocitos tienen una membrana celular formada por ácidos grasos, lipoproteínas y colesterol, entre otras. Pero estas moléculas no se encuentran en la misma proporción en todas las personas ni en todas las células y tejidos de nuestro cuerpo. Se cogen los eritrocitos circulantes y maduros porque dan una estimación bastante acorde con la realidad; de hecho el perfil del transporte da idea de cómo están todos los tejidos.

Es un test complementario al test genético (test nutrigenético, ya muy implantado en España a través de Cinfa). Se ha visto que en la vida y en la salud de las personas, el 50% depende de la genética (en esto se basa el test nutrigénetico) y el otro 50% al ambiente. En este punto entraría el test lipidómico, y es donde más podemos influir desde la oficina de farmacia. “Los farmacéuticos podemos ayudar a mejorar la salud de la sociedad”, dijo la doctora Carla Ferreri, ponente de la sesión; y es que la nutrición se relaciona con la prevención, preparamos nuestro cuerpo según lo que comemos. De ahí la importancia de saber cómo son nuestras membranas celulares para darle a las células (y en definitiva a nuestro cuerpo) aquello que realmente necesita.


Me gustó mucho la defensa que hizo de la dieta mediterránea, de la cual soy fan. La pirámide de la dieta mediterránea se construyó después de llevar años usándola. Y en la base se encuentran las “moléculas del estado de ánimo” (mood molecules), aquellas relacionadas con la actividad física, el descanso y la convivencia (endorfinas, prostaglandinas...). Los lípidos, en 10 años han pasado de estar en la base de la pirámide, a ir subiendo poco a poco. Actualmente se recomienda que los lípidos se correspondan con un 30-35% de las kcal totales, en condiciones normales. Aún así, la dieta no produce efectos similares en todos, ya que la velocidad a través de la membrana lipídica es distinta en cada persona. De ahí la importancia de conocer esa membrana para ingerir lo que más necesitamos, y reducir aquello más abundante. En esto se centra el test lipidómico.

En la membrana celular, los ácidos grasos saturados aportan rigidez, y los insaturados fluidez. Por eso es importante mantener un equilibrio entre ambos. Por su parte, el colesterol también regula la rigidez-fluidez de la membrana. Un aspecto positivo del test es que su fácil realización (extracción de sangre capilar en el dedo) permite en poco tiempo ver cómo va evolucionando la membrana según la dieta que realizamos.

¿Qué analiza el test?
         - Porcentaje de ácidos grasos y los valores óptimos
         - Índice de equilibrio (balance lipídico)
         - Índice de actividad enzimática
         - Índice de riesgo cardiovascular
         - Ácidos grasos trans
Los indicadores moleculares de la membrana celular son: fatiga metabólica (ácido palmitoleico, AGS/AGMI), inmunidad y defensa celular (ω6, EPA ω3), cardiovascular (AGS, ω3), inflamación (ARA ω6, ω6/ω3), neuro (DHA ω3) y estrés radicálico (trans, trans/ARA).

Además del análisis, se realiza una anamnesis, sobre el estilo de vida de la persona y su alimentación. Los resultados obtenidos tras hacer el análisis se comparan con unos valores normales estadísticos. Actualmente se está haciendo un proyecto similar al código de barras, para gente sana y enferma. 

Según los datos obtenidos puede ser necesario recurrir a un nutracéutico (alimento o parte de un alimento que proporciona beneficios para la salud), siempre sin modificar la medicación de la persona, durante un periodo de 4 meses, con ciclos de tres semanas ingiriendo y una de descanso. Esto no siempre será necesario, pero sí la alimentación, que es un elemento indispensable para recuperar el equilibrio.

Su ámbito de implantación es muy amplio: puede ser utilizado para reequilibrar el metabolismo, para mantener la buena forma deportiva, en casos de alergias, en fatiga y cambios de humor, en embarazo, para el bienestar de la piel, para proteger el corazón y la salud cardiovascular, para controlar el colesterol...

Como conclusión, este va a ser el futuro de la nutrición, pero ¿estamos preparados a día de hoy para su realización en las farmacias?
    


Para más información: http://www.lipinutragen.it/