jueves, 17 de diciembre de 2015

Una Navidad ligera

Las fiestas de Navidad son conocidas, entre otras muchas cosas, por los kilos. Y no me refiero a la campaña del kilo, que este año ha triunfado también desde las farmacias. Es el primer año que se realiza con alimentación infantil (leches, cereales, potitos), y se puede decir que la Gran Recogida 2015 del Banco de Alimentos ha sido todo un éxito.

Me refiero más bien al temor que se tiene a engordar unos kilos, o más que temor ya se cuenta con ello y se da por supuesto. Estas Navidades te propongo, además, "engordar" no de kilos, sino engordar de alegría, de generosidad, de cariño, de tiempo dedicado a los demás, de compasión ante los que sufren o están solos... ¿Quieres intentarlo?

No está mal eso de ponerse a dieta con el año nuevo, pero podemos empezar a cuidarnos desde ya. Por eso me adelanto a las fiestas y te adjunto un menú y una serie de recomendaciones que pueden ayudar a mantenernos a raya y que no se nos haga tan dura la cuesta de enero.



Ejemplo de menú para la comida:

            Entrantes:         Jamón ibérico con pan y tomate
                                   Brocheta de anchoas y guindillas
                                   Calabacines rellenos con espárragos verdes

            Plato principal (elegir): Merluza al vapor con vinagreta
                                         Ó Trenzas de solomillo de cerdo con champis

            Postre:             Fresas con mascarpone


Este es un ejemplo de comida que podríamos elegir, por ejemplo, para el día de Navidad o Año Nuevo. Contiene tanto proteínas de origen animal, como algo de hidratos de carbono, fruta y verdura... Se podría decir que es una comida bastante equilibrada. Para el caso de la cena, podríamos hacer una sopa de fideos o una crema de verduras añadiéndole un poco de patata y algo de pan (para conseguir cubrir los hidratos de carbono).

No obstante, sé que muchas veces la comida nos va a venir dada, y no podremos seleccionar aquellos platos más sanos y equilibrados. Por eso, en la cena suelo recomendar hacerla más sencilla, a base de frutas y verduras, que normalmente es lo que escasea en las comidas copiosas de las celebraciones.

Algunos consejos que te pueden ayudar...

- Si tienes una comida, hacer la cena más ligera; y al revés.
- Comer despacio, masticar bien (dar conversación te puede ayudar a conseguirlo).
- Ir caminando al lugar de la comida o salir a la calle a estrenar los Reyes.
- Beber mucha agua: el alcohol nos deshidrata. Combinar cualquier bebida que tomemos con agua.
- Aprovechar el desayuno y la merienda para ingerir fruta (en la comida y la cena será más difícil conseguirlo).
- Si podemos elegir un plato, elegir el menos calórico, las tecnologías culinarias más sencillas, las que aporten menos grasa (horno, vapor, plancha).
- No llenarnos el plato, ponernos un poco menos de lo que nos gustaría.
- Controlar la ingesta de turrón y dulces.


Creo que te pueden ayudar estas recomendaciones ante las fechas que se aproximan. No lo olvides: intenta equilibrar la comida con la cena (si una es más copiosa, que la otra sea más sencilla) y muévete.
 
Espero que te sirvan y... ¡feliz Navidad!